Estadisticamente correcto

Dicen que el sexo lo complica todo.

Pero yo creo que no. Que lo que lo complica es todo lo demás. Las llamadas para contar cosas solo por contar, los compromisos con la familia, preguntar por los sobrinos del otro, acudir a los actos importantes, el intercambio de música, los viajes con conversaciones de verdad.

Eso lo complica todo.

A veces, me da pena reconocerlo pero es así, me gustaría ser "estadísticamente correcta" y tener los probleas que tiene todo el mundo, quejarme del trabajo y de mis jefes y de algún familiar pesado y tener una pareja "estadísticamente normal" con la qe discutir porque ya no hacemos nada nuevo.

En vez de eso, por mi cabeza pasan millones de pensamientos, recuerdos y escenas vividas que, para muchas personas "estadísticamente normales" son impensables, inamiginables. Eso hace que mi vida sea un poquito más compleja que para los demás.

El otro día se lo contaba a un confesor anónimo, una de esas personas que, al no conocerme prácticamente de nada, no tenía porque mentirme ni quedar bien. Y le reconocía que yo, al contrario que él que también es "estadísticamente incorrecto", tenía la posibilidad de elegir volver a la estadística. Pero él, sonriéndome muy amable y apoyando su mano en mi hombro transmitiéndome su apoyo, me dijo que eso a él le parecía imposible, que después de probar ciertas cosas que te han gustado no se puede volver atrás, porque siempre tendrás ciertas imágines e inquietudes en la cabeza que te harán estar frustrada. Puede ser, es posible casi seguro, pagado incluso, que tenga razón. Soy consciente de que en este mundo no se puede tener todo y sé que a algo, más pronto o más tarde, tendré que renunciar, ahora bien, en este mismo momento no tengo ni idea de qué será lo que elija.

Parece que empieza a soplar el viento por fin, y si no sopla soplaré yo porque, por fin, soy consciente de que no puede seguir la cosa así.