Yo quiero que me encanten desde la calle a la ventana de mi cuarto.
Y que me despierten por la mañana con el olor de las tostadas hechas en la sandwichera.
Que me canten canciones al oído.
Y que me dejen notas escóndidas por la casa o, mejor, notas pegadas en el frigorífico.
Que me desnuden subiendo la escalera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario